Ovinos
La semana de ventas en Australia comenzó el pasado martes con una oferta en el centro de Melbourne de lanas procedentes de Nueva Zelanda, que no inciden en la formación del Indicador de Mercados del Este (IME). En dicha operativa las lanas merinos permanecieron prácticamente sin cambios, mientras que los lotes de 17 micras y más finos, con buenos datos adicionales, alcanzaron primas importantes en sus cotizaciones, pero en un posicionamiento más selectivo por parte de la demanda.
El programa de afinamiento denominado Corriedale Fino que lleva adelante Central Lanera Uruguay en conjunto con distintas cabañas viene reflejando el interés por hacerse de esta genética que puede lograr hasta un 20% de sobreprecio en los mercados.
Martín Riso, representante de esa cooperativa, explicó a Tardáguila Agromercados que “se ha visto una mejora de precios por la finura conseguida, con lotes que bajan 2 o 3 micras respecto al promedio, con una referencia de 25 y 26 micras, siendo realmente finos dentro de la raza”.
En la jornada de ayer se dio a conocer un nuevo caso de abigeato en el norte del país, donde para los delincuentes es una oveja más pero para los productores es una pérdida de 10 o 15 años de avance genético, para alcanzar niveles productivos que permitan continuar mejorando los niveles productivos.
Hace varios años la Asociación Agropecuaria de Artigas (AAA), decidió realizar una exposición y venta de ovinos durante el verano, teniendo en cuenta la proximidad con el periodo de servicio.
Mauricio Maia, directivo de la institución dijo que la actividad comenzará temprano, a partir de la hora 8:00 con un jurado de admisión compuesto por integrantes de la gremial y técnicos del Secretariado Uruguayo de la Lana, para garantizar la aptitud reproductiva de los ejemplares que posteriormente terminaran en la pista de ventas.
Esta semana, de acuerdo al diálogo con varios operadores, el mercado estuvo muy tranquilo hasta la jornada de ayer. Varias consultas por parte de los productores no lograron encontrar los valores de la pasada semana y eso llevó a que se retrajera también la demanda.
Un operador del departamento de Artigas dijo que se ofertó un lote en el eje de las 19 micras, grifa celeste, con buen rendimiento y la propuesta de la demanda se posicionó en los US$ 7,30, valor que no conforma al vendedor que decidió seguir esperando para vender su lana.
El mercado lanero australiano cerró una nueva semana a la baja, perdiendo 11 centavos en la suma de los tres días de actividad. La oferta de lanas procedentes de Tasmania, en el mercado de Melbourne, lanas finas y con alto rendimiento al lavado que lograron importantes primas y se destacaron en el mercado, sin embargo estos valores se fueron diluyendo en el contexto general de la oferta.
Un gran remate se registró este miércoles con la venta de los ovinos de La Pastoral de Capurro, que tuvo una colocación total y agilidad en las ventas, que estuvieron a cargo del escritorio Megaagro.
Durante el transcurso de la semana se fueron concretando varias consultas por parte de los productores, pero con una demanda un poco más cautelosa, a la espera de que cerrara la operativa a nivel internacional.
En la última venta del mes de enero, el mercado lanero australiano mostraba un esbozo de mejoras en el Indicador de Mercados del Este (IME), a pesar que en el contexto general del mes, no lograba recuperar todo lo ganado en la primera venta luego del receso de las tradicionales fiestas.
El mercado lanero entre sus subas y bajas durante el transcurso de la zafra, no logra encontrar un punto de equilibrio que permita generar una lectura hacia los próximos meses más concreta del mercado, o en realidad quizás la lectura es esta y continuará con esta variabilidad.
A grandes rasgos uno podría decir que la incertidumbre de la guerra comercial entre China y Estados Unidos era la gran responsable de la caída, así lo marca la caída en el ritmo de las exportaciones de textiles entre ambos países durante 2019. A esto le sumábamos la variable de la calidad de la lana en Australia y las idas y venidas con la lana comprada en Sudáfrica durante el período de la aftosa.