Participaron Saboto Caesar, Ministro de Agricultura de San Vicente y las Granadinas; Krysta Harden, directora ejecutiva y presidenta del Consejo de Exportadores Lácteos de Estados Unidos; Manuel Bravo, presidente y director ejecutivo de Bayer México; Michael Kremer, profesor en la Universidad de Chicago y Nobel de Economía; y Manuel Otero, Director General del IICA.
Bienestar, productividad, rentabilidad y sustentabilidad de los agricultores deben estar al tope de las prioridades de cualquier estrategia para pensar el futuro de los sistemas agroalimentarios, que atraviesan un proceso de transformación aguda debido a los cambios científicos y tecnológicos.
Ese fue uno de los consensos alcanzados por el panel de expertos convocados a un seminario organizado por el Consejo de las Américas y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) y que tuvo como título “Agricultura, Comunidades Rurales y Sistemas Alimentarios en las Américas: Hacia un enfoque integral”.
La discusión, en la que se aportaron enfoques desde los sectores público y privado, trató sobre el futuro de la actividad agropecuaria en el escenario pospandemia de Covid-19, la imprescindible participación del sector en el enfrentamiento al cambio climático y el refuerzo a la seguridad alimentaria global, para lo que el continente americano juega un papel vital.


Susan Segal, presidenta y directora ejecutiva de The Americas Society/Consejo de las Américas (AS/COA) tuvo a su cargo la apertura del evento y destacó la importancia de la reflexión y el intercambio de ideas y conocimientos sobre el futuro de los sistemas alimentarios en un continente que alberga la cuarta parte de las tierras agrícolas del mundo.
Los expositores fueron Saboto Caesar, Ministro de Agricultura de San Vicente y las Granadinas; Krysta Harden, directora ejecutiva y presidenta del Consejo de Exportadores Lácteos de Estados Unidos; Manuel Bravo, presidente y director ejecutivo de Bayer México; Michael Kremer, profesor de Economía en la Universidad de Chicago y Nobel de Economía; y Manuel Otero, Director General del IICA. El director senior de la oficina de AS/COA en Washington, Steven Liston, moderó la conversación.
Entre los asistentes estuvo Rattan Lal, Premio Mundial de la Alimentación 2020 y profesor de la Universidad Estatal de Ohio, quien es considerado la mayor autoridad mundial en ciencias del suelo.
Otero destacó durante su presentación que América Latina y el Caribe es la región más importante del mundo en términos de participación en los mercados mundiales de alimentos, ya que representa el 14% de las exportaciones totales. “En el medio de una crisis tan profunda, destaco que seguimos proveyendo alimentos para 1.000 millones de personas que viven en las Américas. Y que mientras las exportaciones totales de la región cayeron un 9% durante 2020, las agroalimentarias crecieron un 2%. De esto se trata la resiliencia. Quedó demostrado que el sector agrícola en las Américas es resiliente”, dijo Otero, quien llamó a poner “primero a los agricultores” en las discusiones sobre el futuro de los sistemas agroalimentarios, al tiempo que recordó que la ciencia debe ser el principal insumo de las políticas públicas para el sector.
El Director General del IICA consideró que nada será igual tras la pandemia y afirmó que el Hemisferio puede ser protagonista de una nueva Agricultura 4.0, que deberá producir alimentos saludables de manera climáticamente inteligente y, al mismo tiempo, tendrá que ser socialmente responsable y estará obligada a prestar atención a las demandas de los mercados internacionales.
“Hay que incrementar la productividad –sostuvo- pero también la calidad. No podemos pensar más en una agricultura extractiva. Tenemos que ser armónicos con el ambiente”, remarcó.
Saboto Caesar señaló que la agricultura de los países de América y Latina y el Caribe podría ser aún más competitiva en los mercados internacionales si resolviera sus problemas para acceder al capital y si consiguiera bajar sus costos de producción a través de herramientas científicas y tecnológicas.
En ese sentido, el ministro de Agricultura de San Vicente y las Granadinas consideró que es necesaria una más cercana integración política entre las naciones de la región y una mayor institucionalidad. “Hasta que no reunamos esas condiciones no podremos atraer al sector agrícola más capital, que es lo que nos permitirá aumentar la productividad y la calidad de los alimentos”, afirmó.
Saboto Caesar recordó "el pasado colonial" común a los países de América Latina y el Caribe, que los colocó "en el lugar de proveedores de materias primas" y convocó a la región a trabajar en conjunto en aras de una mayor competitividad. "La integración tiene que servir también para contar con políticas conjuntas de adaptación al cambio climático", dijo el ministro caribeño.