El presidente de la Federación Rural, Jorge Andrés Rodríguez Britos, acompañado por el Dr. Emilio Mangarelli (vicepresidente), participaron de la Asamblea Anual de la Asociación Agropecuaria de Salto (AAS) este fin de semana. En el marco de su alocución, dijo que la presencia en la reunión era importante para conocer el posicionamiento de los productores respecto al rubro ovino en particular, debido a que esta semana se realiza el lanzamiento de la zafra ovina en Tacuarembó.
En este sentido, adelantó que este lunes en el Consejo Directivo de la Federación Rural se terminará de confeccionar un comunicado sobre la admisión temporaria de lanas en Uruguay. Comunicado que luego será refrendado en el lanzamiento de la zafra ovina, el día jueves. En su mano a mano con los productores salteños, Rodríguez Britos, dijo que se trabaja en conjunto con la Asociación Rural del Uruguay en este tema en particular y que “es importante que el gato cace ratones y no el color del gato”.
Consultado por Tardáguila Agromercados, sobre la admisión temporarias de lanas y si la utilización de esta herramienta no estaba siendo la correcta por parte de la industria, el presidente de la gremial dijo: “No tengo dudas, pero no tengo pruebas”. Si bien indicó que el tema se está tratando con cautela, aseguró que “hay cosas que no andan bien”.
Rodríguez afirmó que esta herramienta “es estupenda para favorecer a la industria, en el sentido de la capacidad de producción que tenemos, porque pasamos de 25 millones a casi 6 millones de lanares y eso es un mecanismo que permite a la industria aprovechar su capacidad”. A pesar de ello dijo que se debe trabajar en la generar transparencia en el uso de esa herramienta.
En este sentido, dijo que “no puede suceder, como en la pandemia, que en el mercado interno no había interés por nuestras lanas y seguía entrando lana en admisión temporaria”. Al respecto se preguntó: “¿Un productor de fuera del país puede vender su lana sin el acondicionamiento que tenemos y a precios que no tenemos nosotros?”.
Al finalizar, el productor, remarcó que “las dos cadenas de trabajo, tanto la industria frigorífica como la lanera, no son conscientes de que algunas cosas que hacen le están generando un perjuicio a toda la cadena”.
