“Uruguay se encamina a una de las mejores cosechas de soja en 2025, con una producción que podría superar los 3,3 millones de toneladas, siempre que las condiciones climáticas se mantengan favorables. A pesar de una leve reducción en el área sembrada, estimada en 1,2 millones de hectáreas, se prevé que los rendimientos alcancen 2,9 toneladas por hectárea, impulsando la producción total”, indicó en su último informe de comercio exterior de bienes el instituto Uruguay XXI. De confirmarse esa producción de la oleaginosa para Uruguay se superaría el máximo histórico vigente de la zafra 2016/17, que fue levemente superior a 3,2 millones de toneladas. En la campaña anterior (2023/24), la producción de soja fue de 3,176 millones de toneladas, según la DIEA.
El crecimiento de la producción uruguaya se inscribe en un contexto de expansión regional. Brasil, el mayor exportador mundial, proyecta una cosecha sin precedentes de 163 millones de toneladas, consolidando la sobreoferta global. Sin embargo, la demanda china —que en el pasado absorbió gran parte de este crecimiento— se ha estabilizado en torno a 110 millones de toneladas, limitando el potencial de recuperación de los precios. En este escenario, las cotizaciones locales se sitúan entre US$ 350 y US$ 360 por tonelada, reflejando la presión bajista del mercado global. Con estos valores, se estima que las exportaciones uruguayas de soja en 2025 alcancen los US$ 1.158 millones, según estimó Uruguay XXI.
