La cantidad de vacunos al 30 de junio pasado —dato que se dará a conocer oficialmente en las próximas semanas— se estima en unos 11,25 millones de cabezas, unos 400 mil animales menos que en el mismo día del año anterior.
La caída tiene dos causas principales, la mayor extracción y el menor ingreso de animales al sistema debido a la menor producción de terneros. En realidad, ambas causas tienen, en esencia, un mismo origen, que es la sequía más intensa de las últimas décadas, obligando a una mayor salida de animales de los campos e impactando en la tasa de preñez del rodeo de cría debido al mal estado de las vacas durante el entore.
La tasa de extracción en 2023/24 fue de 23%, tres puntos porcentuales superior a la del ejercicio anterior, aunque por debajo del pico de 24,7% de 2021/22. Hubo un aumento tanto de la faena como de la exportación de ganado en pie.
La faena durante el ejercicio fue de 2,38 millones de cabezas, 225 mil más que en el anterior. El crecimiento, como siempre pasa cuando se debe a una decisión de quitarle carga a los campos, se dio fundamentalmente en la categoría de vacas. La elevada proporción de vacas falladas hizo crecer la faena de animales de esta categoría 27% en el ejercicio (191 mil) a 912 mil vacas. Los novillos crecieron solo 2,5% anual.
El otro factor que influyó en el aumento de la tasa de extracción fue la exportación de ganado en pie. Salieron vivos por la frontera 311 mil vacunos —amplia mayoría terneros— duplicando las 155 mil cabezas del ejercicio anterior.
El impacto de la sequía 2023 sobre la cantidad de terneros destetados en 2024 no es menor. A eso hay que sumarle una fluida exportación en pie en el último trimestre del ejercicio (abril a junio), amplísima mayoría terneros nacidos en la primavera anterior. Se embarcaron cerca de 100 mil terneros en ese período. Ambos factores seguramente contraerán la cantidad de terneros contabilizados a no mucho más de 2,5 millones de cabezas, la menor cantidad de los últimos 14 años, justamente desde el impacto de la anterior intensa sequía de 2008/09.
En definitiva, tras el crecimiento del rodeo el ejercicio anterior, en 2023/24 hay una lógica contracción que responde fundamentalmente al impacto de la sequía. Pero no se transformará en una tendencia. Todo indica que durante el ejercicio recién comenzado el rodeo vacuno en Uruguay debería crecer debido a que se proyecta una generación récord de terneros del orden de los 3,2 millones.