En un movimiento llamativo para los plazos y etapas que suele manejar China para sus protocolos de importación de carne vacuna de distintos proveedores, en las últimas horas quedó cerrado un nuevo acuerdo con Bolivia, uno de sus últimos proveedores de América Latina, que incluye ítems que otros exportadores están añorando hace bastante tiempo.
De acuerdo con información a la que accedió WBR, el nuevo acuerdo sanitario entre Bolivia y China incluye no solo carne vacuna congelada deshuesada (de animales menores a 30 meses), sino también una extensa lista de menudencias comestibles y subproductos como grasa corporal sin refinar, mondongo (rumen, omaso, abomaso y retículo), corazón, riñón, hígado y diafragma, cartílagos, testículos, aorta, tendones y pene bovino.
El acuerdo posiciona a Bolivia como un nuevo proveedor con acceso completo al mercado chino, un avance que contrasta con la situación de Argentina, que negocia desde 2015 la habilitación de menudencias sin éxito definitivo. “Esa inclusión va a generar ruido en el Mercosur, sobre todo en Argentina, donde el tema sigue trancado”, consideró un trader.