La Federación Rural del Uruguay expresó su preocupación ante la creciente inseguridad que afecta al medio rural, con especial énfasis en el incremento de los casos de abigeato y los ataques recurrentes de jaurías de perros a las majadas ovinas. En un comunicado emitido este martes 12 de agosto, la gremial sostuvo que esta situación se ha transformado en una “normalidad” que genera un “total desánimo” para el desarrollo de la vida de las personas vinculadas al campo.
La institución recordó que esta problemática viene siendo advertida desde hace tiempo y fue remarcada en su Congreso anual de 2025, insistiendo en que la seguridad rural debe ser considerada una prioridad nacional. El Consejo Directivo señaló que “la batalla no está perdida, pero exige medidas concretas y lineamientos claros a nivel país”, reclamando la inmediata conformación de las Comisiones de Seguridad Rural en todos los departamentos, con trabajo activo y coordinado.
La gremial manifestó su inquietud por la lentitud en la convocatoria de dichas comisiones, que deben ser —según el comunicado— “espacios efectivos para diseñar estrategias locales que respondan a las necesidades específicas de cada región”. El planteo incluye la necesidad de comenzar las acciones de forma inmediata y con una coordinación que permita dar respuesta a la realidad del territorio.
El documento también alerta sobre el impacto productivo y económico de los ataques de perros sueltos, que continúan provocando importantes pérdidas en la majada nacional. Estos episodios, señala la Federación, están “diezmando la producción ovina” y suman un factor adicional de desaliento al rubro. Si bien no se detallan cifras oficiales de pérdidas económicas, distintos informes de los últimos años han estimado que cada ataque puede provocar la muerte de decenas de ovinos, con un perjuicio que en algunos casos supera los miles de dólares por productor afectado.
La Federación Rural cuestionó la inacción frente a estos problemas y planteó la necesidad de asumir responsabilidades concretas. “Nos preguntamos hasta cuándo vamos a seguir permitiendo esto. Hay que hacerse cargo”, afirma el comunicado, que subraya el derecho de los productores rurales a trabajar en sus tierras, criar sus animales y “dormir tranquilos”.
El reclamo se enmarca en un contexto de persistencia de delitos rurales que, según datos del Ministerio del Interior, incluyen tanto el robo de ganado como hurtos en establecimientos, vandalismo y daños a infraestructuras productivas. En 2024, el abigeato registró más de 2.000 denuncias en todo el país, y aunque en algunos departamentos se observó una baja interanual, en otros —particularmente en zonas de alta producción ovina— la tendencia fue al alza.
En paralelo, el problema de los perros sueltos continúa siendo objeto de debate y preocupación para el sector. Un informe de la Comisión Nacional de Tenencia Responsable de Animales de Compañía (Cotryba) difundido en 2023 señalaba que en Uruguay existen más de 1,7 millones de perros, de los cuales un porcentaje significativo circula libremente en áreas rurales y suburbanas, generando riesgos tanto para la fauna doméstica como para la silvestre. Las majadas ovinas, en particular, se ven afectadas por la acción de jaurías, que provocan muertes, heridas graves y abortos en los vientres preñados, con consecuencias directas en la productividad y en la rentabilidad del rubro.
En este escenario, la Federación Rural insiste en la necesidad de un abordaje integral que incluya acciones de prevención, control y sanción. Para ello, consideran fundamental que las Comisiones de Seguridad Rural funcionen como instancias operativas de coordinación entre productores, autoridades policiales, gobiernos departamentales y organizaciones vinculadas al agro, permitiendo diseñar planes de acción específicos para cada región.
El comunicado culmina reafirmando que los productores rurales “tienen derecho” a desarrollar su actividad sin el constante riesgo de perder su producción por delitos o ataques de animales sueltos, y que la seguridad en el campo “no puede seguir siendo postergada”.