El ovino atraviesa una de sus etapas críticas, con dificultades en la colocación de la lana y la carne ovina tiene sus altibajos, que presionan los sistemas productivos. El Dr. Juan José Senatore, directivo de la Asociación Agropecuaria de Artigas (AAA), señaló que la situación actual del rubro está marcada por la falta de estímulos y una serie de factores adversos que han llevado al productor a desestimularse.
Con respecto a la carne ovina, el profesional recordó que se habilitó el pasaje de ovinos en pie a través de la frontera Artigas-Quaraí, sin embargo el cambio de gobierno en el país vecino y sus nuevas políticas internas han impedido aprovechar esta oportunidad. "La herramienta está disponible, pero los importadores brasileños no nos compran como antes", comentó Senatore.
El rubro ovino, que concentra su mayor stock en los departamentos de Salto, Artigas y Paysandú, según los datos de DICOSE, ha experimentado una marcada disminución en los últimos años, y la situación parece que aún está lejos de presentar mejoras.
Senatore explicó que uno de los primeros pasos para revertir esta tendencia debería ser la implementación de subsidios o beneficios especiales que incentiven la retención de vientres ovinos. "Una solución podría ser ofrecer crédito a largo plazo o algún tipo de subsidio para retener los vientres, como se ha hecho con otros sectores", señaló.
Entre los principales factores que han afectado al sector ovino, Senatore destacó el abigeato, los depredadores, la falta de mano de obra y la caída de los precios internacionales. "El productor no es tonto, cuando los números no cierran, no cierran", afirmó el profesional.
La pérdida de ovejas por robos y ataques de perros ha sido un problema recurrente en los últimos 15 o 18 años, afectando gravemente la rentabilidad del rubro. A esto se suma la falta de acciones concretas para controlar el problema de los perros, que según Senatore, ha sido un tema políticamente sensible y se ha evitado por el posible costo electoral.
Por otro lado, la mano de obra rural ha disminuido considerablemente, ya que muchos trabajadores han migrado hacia las ciudades, contribuyendo al crecimiento de los cinturones urbanos.
Desde el punto de vista técnico, remarcó la importancia de que instituciones como el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) hayan propuesto soluciones. Sin embargo, según el veterinario, es necesario ir más allá y premiar a los productores que logran mejores resultados, como aquellos con porcentajes de señalada superiores al 95%. "Se podría ofrecer algún tipo de incentivo, una ‘zanahoria’ al productor ovino, que hoy en día no la tiene", concluyó Senatore.