Entre enero y octubre de 2024, las exportaciones de lana y productos de lana crecieron 21% en valor, alcanzando los 131,9 millones de dólares, mientras que las de carne ovina sufrieron una caída del 26 %, generando 55,8 millones de dólares. Estos resultados reflejan un año de altibajos marcados por la creciente demanda de países asiáticos y la diversificación de destinos en Medio Oriente.
Lanas crece 21%
Entre enero y octubre de 2024, la lana logró un aumento del 21% en el valor total de sus envíos al exterior, que alcanzaron 131,9 millones de dólares. Este crecimiento estuvo impulsado por la demanda de China, que absorbió el 46% del valor exportado, equivalente a 60 millones de dólares. En contraste, destinos europeos tradicionales, como Italia y Alemania, experimentaron retrocesos significativos en sus compras.
El volumen de lana exportada alcanzó los 38,4 millones de kilos, con un incremento del 66% respecto al año anterior. Este avance estuvo liderado por la lana sucia, cuyas exportaciones aumentaron un 144%, seguida de la lana lavada, con un crecimiento del 113%, mientras que, en el caso de los tops, el incremento fue del 6% interanual. China nuevamente destacó como el principal comprador, siendo el destino del 86% de la lana sucia exportada y del 60% de la lana lavada.
Los "tops" (lana peinada) presentaron una contracción del 11% en el valor exportado, pasando de 60 millones de dólares en 2023 a 54 millones en 2024. A pesar de esta baja, China mostró un incremento en la compra de esta categoría, con un crecimiento del 257 %, posicionándose como el tercer destino después de Italia y Alemania, cuyos pedidos decrecieron 29% y 13% respectivamente.
Las lanas finas (menos de 21 micras) lideraron las exportaciones en términos de valor, mientras que las lanas de mayor grosor también ganaron terreno, impulsadas por un aumento en volumen de hasta un 96 % en algunos casos.
Carne ovina baja 26%
Entre enero y octubre de 2024, las exportaciones de carne ovina uruguaya enfrentaron un panorama complejo, registrando una caída del 26% en valor respecto al año anterior y totalizando 55,8 millones de dólares. Aunque Brasil se mantuvo como el principal destino, con un crecimiento del 12 % en sus compras, otros mercados tradicionales como China vieron una drástica reducción del 71%.
En términos de volumen, se exportaron 13,3 millones de kilos de carne ovina, un 25% menos que en el mismo período de 2023. A pesar de esta disminución, los países árabes y Rusia emergieron como actores clave. Entre Emiratos Árabes Unidos, Omán, Arabia Saudita, y otros, las exportaciones alcanzaron un valor conjunto de 13 millones de dólares. Rusia, por su parte, experimentó un incremento de 350% en sus compras, pasando de 670 mil a más de 3 millones de dólares.
La carne congelada con hueso representó el 80% del valor total, aunque con una reducción del 31% respecto al año anterior. Por otro lado, la carne congelada sin hueso mostró un desempeño positivo, creciendo un 6%, especialmente gracias al interés de mercados como Canadá y Emiratos Árabes Unidos. El desempeño interanual también reflejó cambios en la estrategia de exportación: la diversificación hacia países de Medio Oriente y el fortalecimiento de las relaciones con Brasil permitieron mitigar parcialmente la pérdida de volumen hacia Asia. Fuente: en base a informe elaborado por el SUL