El pasado 8 de agosto, la Comisión de Ganadería del Senado recibió a una delegación de la Sociedad de Productores de Leche de Florida (SPLF) y de la Agremiación de Tamberos de Canelones (ATC) para avanzar con la creación de un fondo que permita apalancar la expansión del riego para la lechería, tomando como base una propuesta que elaboró y presentó Ceres a pedido de la SPLF. Por la SPLF concurrieron el integrante de la Comisión Fiscal y expresidente, Fabián Hernández, y su gerente Ing. Agr. Andrés Barreira, mientras que por la ATC lo hizo el productor Justino Zabala.
En la actualidad se descuentan $ 2,30 del litro de leche tarifada. Esto comenzó en 2018 para la formación del Fogale (Fondo de Garantía Lechero). Con el dinero de ese fondo se creó un fideicomiso, que termina de pagarse este año. Parte de esos fondos se utilizaron para el FRIL (Fondo de Reconversión de Industrias Lácteas), por lo que el descuento se extendió dos años más, hasta 2026.
“Lo que vinimos a pedir hace dos años fue que el descuento se extendiera por un mínimo 10 años más para crear un fondo. Por suerte, y por unanimidad en ambas cámaras, eso se aprobó. Por lo tanto, el descuento se va a seguir haciendo por diez años más a partir de que se termine de pagar el FRIL, es decir, a partir de 2026. No obstante, ahora necesitamos el lugar hacia donde debe ir ese dinero, o sea, la creación del fondo para que se envíe la plata. Luego debe estudiarse el mejor destino de ese dinero –nosotros tenemos una propuesta– para la estabilidad y el desarrollo de la lechería”, indicó Hernández en la comisión del Senado, según la versión taquigráfica. Se estima que ese fondo pueda generar unos US$ 40-50 millones en un plazo de 10 años.
“Nuestra idea es ver cómo hacer para que ese fondo llegue, de alguna manera, a tener un impacto importante en esos productores. Es decir, se trata de generar un fondo que permita que los productores más chicos accedan a tecnología, como por ejemplo en el riego. No es que el productor vaya a poner riego en su campo. Muchos, por razones físicas, no pueden hacerlo, pero quizás una sociedad o un grupo de productores puede tener un campo a través del Instituto Nacional de Colonización y para el riego eso es una inversión importante. Cualquier proyecto de riego implica una inversión de más de US$ 100.000. Eso para un productor chico es difícil, pero si se agrupa con otro puede encontrar la posibilidad de hacerlo. Este fondo que nosotros estamos planteando hoy pretende abarcar fundamentalmente eso: que sea una palanca para que la tecnología que está empezando a estar disponible para todos llegue a los productores menores”, explicó Zabala a su turno ante los legisladores.
Por su parte, Barreira recordó que la SPLF viene trabajando hace siete años atrás con el tema del riego, en un proyecto que involucró a casi todas las gremiales lecheras del país. Se trata del proyecto DACC (Desarrollo y Adaptación al Cambio Climático) del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, que dio fondos para implementar la tecnología. “La idea en ese momento era probarlo en la cancha, en productores reales. La idea que se plasmó en ese proyecto era que fuera piloto en cada gremial para replicar la tecnología a nivel de productores individuales. Esa experiencia fue muy buena en todas las gremiales lecheras que lo implementaron en general y en nuestro caso (por el campo La Cruz) nos dio muy buenos resultados”, aseguró.
“La idea es que el riego se empiece a utilizar en predios que son del Instituto Nacional de Colonización. Lo único que hay que hacer es dar el paso. Ahí hay trabajo colectivo, pero también existen predios de productores en los que se puede implementar la tecnología del riego y promoverla a nivel de productores privados. En todos los rubros, pero especialmente en la lechería, los productores que llevan la punta no tienen por qué ser grandes, sino que simplemente adoptan tecnología más rápido en cualquier estrato de tamaño. Sería una buena medida que eso empezara a replicarse”, consideró Barreira.
El gerente hizo foco en el trabajo que elaboró Ceres a pedido de la SPLF sobre Riego y Productividad, cuyos resultados ya se hicieron públicos. “Creemos que esto será algo muy necesario porque la variabilidad climática que tenemos es real. El riego permitirá sostener la producción todos los años y asegurar la comida, que es el bien que falta cuando la cosa viene brava”, señaló el gerente.
“Quiero aclarar que no queremos competir con la ANPL, sino que venimos a presentar diferentes ideas que quizás puedan ser compatibles. La ANPL presenta un proyecto anticíclico para el precio de la leche y nosotros estamos presentando uno de desarrollo y estabilidad de la producción de la leche para dar estabilidad a todos los productores, sobre todo a los más pequeños, que son los que no tienen acceso a este tipo de tecnología. Esto es como un insumo, pero lo más importante es la creación del fondo, cuyo destino se verá después. Creo que su uso lo decidirán los políticos, y las gremiales tenemos que ponernos de acuerdo para tratar de quedar todos conformes y conseguir lo que buscamos, que es perder menos productores lecheros, achicar esa sangría e incentivar a los productores jóvenes a entrar o a quedarse en el negocio”, precisó Hernández.