Según la investigación de Cepea (Centro de Estudios Avanzados en Economía Aplicada), Esalq/USP, el precio de la leche recolectada en febrero y pagada a los productores en marzo cayó 2,5%, alcanzando R$ 1,9384/litro (US$ 0,34/litro).
Como resultado, la caída acumulada en el primer trimestre del año es del 9,8% , en términos reales (descontando la inflación por el IPCA del 21 de febrero). Aun así, este valor es un récord para un mes de marzo y supera en un 28,3% al registrado en el mismo período de 2020.
La reducción de los precios de la leche al productor estuvo vinculada al debilitamiento de la demanda de productos lácteos, ante la disminución del poder adquisitivo de los brasileños, el fin de recibir ayuda de emergencia para muchas familias, el agravamiento de los casos de covid-19 y el aumento del desempleo. Con el consumo debilitado, se incrementó la presión de los canales de distribución para obtener menores precios en las negociaciones de derivados con las industrias lácteas.
Así, las encuestas de Cepea realizadas con apoyo financiero de la Organización de Cooperativas (OCB) revelaron que, en promedio en febrero, en la venta al por mayor del estado de São Paulo, los precios de la leche UHT, el queso mozzarella y la leche en polvo comercializados cayeron 5,5%, 8,4% y 7,6%, respectivamente, respecto al mes anterior.
Los precios spot de la leche en Minas Gerais también disminuyeron 0,7% en el promedio de febrero, influenciados por el débil desempeño del mercado lácteo.
Aun así, es importante señalar que la oferta de leche en el campo es limitada. El Índice de Financiamiento de la Leche (ICAP-L) cayó un 4,5% de enero a febrero y la expectativa de los agentes del sector es que esta caída se acentúe en los próximos meses, debido al avance de la temporada baja.
Además, la apreciación considerable y continua de los granos (componentes principales de los costos de producción de la ganadería lechera) ha comprometido el margen del productor y reducido las inversiones en la actividad.
Según datos de Cepea, en febrero el tambero necesitó, en promedio, 42,2 litros de leche para adquirir un saco de maíz de 60 kg. (Relación Leche /Maíz = 1,42), un 2,4% más que en enero y un 15,7% más que en el mismo período del año pasado.
Con el alto costo, la gestión de la alimentación animal se ha visto obstaculizada y la matanza de animales ha crecido (aprovechando los atractivos precios del mercado de la carne vacuna). En consecuencia, se espera que la oferta de leche en el campo siga siendo limitada en los próximos meses. En este escenario, la competencia de las industrias por la compra de materia prima debería intensificarse, conduciendo, en consecuencia, a la recuperación de los precios al productor.
Gráfico 1. Serie de precios promedio recibidos por el productor (neto), en valores reales (deflactado por el IPCA de enero / 2021).
Fuente: Traducido por el OCLA del newsletter de MilkPoint.