Javier Dotta es la tercera generación de tamberos en su familia. Explota un tambo de unas 70 vacas en Paso del Candil, Florida. Hace 10 años que la matrícula de Conaprole pasó a su nombre y unos 5 años donde pasó directamente a manejar el emprendimiento familiar, que hoy ordeña unas 70 vacas con una máquina de seis órganos. Su padre terminó de pagar hace siete años el campo de unas 52 hectáreas donde está ubicado el tambo. Javier paga un arrendamiento por ese predio y también por otras 22 ha de un campo lindero de un tío, por lo que la superficie total llega a las 74 ha. En entrevista con La Lechera, el tambero floridense habló sobre cómo está viendo hoy el negocio y sus perspectivas.
¿Qué características tiene el tambo?
Es una explotación con base pastoril. Se hacen reservas en el propio establecimiento y también desde hace algunos años se comenzaron a comprar desde fuera del campo, principalmente fardos secos, unos 70 por año.
¿Qué carga de concentrado estás utilizando hoy?
Actualmente estoy dando entre 8 a 10 kg de ración por vaca por día. En general utilizo Prolacta, pero puntualmente ahora estoy dando Cebamix (ración en base a cebada) en un 60% y el restante 40% con una mezcla de canola con maíz molido. Ya tengo presupuestado y esperando por el armado para instalar dos silos aéreos con comederos automáticos en el tambo.
¿Tenés algún empleado o realizás todas las tareas del tambo?
En su momento tuve un empleado. Ahora estoy solo, esperando a ver cómo se plantea un poco la cosa a futuro para ver si vuelvo a contratar a alguien.
¿Cómo estás viendo la realidad del negocio? Se viene de un impacto fuerte por la sequía y ahora con un otoño por demás lluvioso que le pegó a la remisión.
El precio de la leche no ha acompañado mucho. Siempre se trata de hacer todo lo posible para ir mejorando en diferentes aspectos como la calidad del ganado, el estado corporal, con la producción, como buscan la mayoría de los tamberos. Hace prácticamente dos años que estoy manteniendo un promedio de unos 20-22 litros de leche/día por vaca. Ahora, con el exceso de lluvias, se ha sentido bastante la suba de costos por un mayor uso de raciones, que también han subido de precio respecto a las referencias que teníamos en el arranque del otoño. Eso achicó bastante el margen en estos últimos meses; estamos en un momento complicado. Pensar en otra primavera nuevamente seca como la pasada con este precio de la leche sería muy difícil de sobrellevar.
¿Tenés previsto realizar nuevas inversiones en el corto plazo?
Tengo previsto realizar inversiones, pero más para adelante. A mi juicio, el Estado estuvo un poco ausente para auxiliar a los productores lecheros durante la última seca. Obviamente que vino bien la partida que se aprobó en el Parlamento para liberar esos casi US$ 8 millones del Fogale para productores que remitían hasta 3.000 litros.
¿Qué servicios de la SPLF utilizás?
Utilizo todo lo que es siembra, forraje, administración, BPS, mosquito, retroexcavadora, y también el campo de recría. Estoy conforme, a veces quizás las vaquillonas no vienen con el estado que uno quisiera, pero hay factores climáticos que uno no puede desconocer. La última partida de vaquillonas estaban lindas, pero hubo mejores. Ahora tengo previsto ingresar por primera vez un lote de terneras al sistema de recría intensivo.
La ficha del tambo
El tambo de la familia Dotta tiene actualmente 74 vacas en ordeñe, 7 vaquillonas, 9 vacas secas, 14 vaquillonas para inseminación para el otoño y 22 terneras en un establecimiento de 61,2 hectáreas (ha), de las cuales unas 54 ha se utilizan como plataforma de pastoreo. La rotación se hace con praderas a 3 años, luego un verdeo de invierno y un sorgo forrajero. La mayor parte de las reservas se hace con sorgo forrajero como silo pack de fardos o también de praderas.
Actualmente está suministrando unos 350 gramos de concentrado por litro de leche. Durante los últimos 12 meses móviles, el tambo produjo 474 mil litros de leche, una mejora apreciable frente a los 284 mil litros del año 2016. El tambo cuenta con una planta de tratamiento de efluentes, que luego se utilizan para regar las pasturas. También cuenta con agua en la parcela en la mayor parte de la plataforma de pastoreo. El establecimiento cuenta con el asesoramiento mensual del Ing. Agr. Héctor García.