La Federación Uruguay de Grupos Crea (Fucrea) organizó una charla técnica virtual el pasado mes con dos técnicos con foco en la suba de costos que enfrentan los tambos. La primera presentación estuvo a cargo del Ing. Agr. MsC PhD Alejandro Mendoza, de INIA, y se tituló Concentrados caros y falta de reservas: ¿qué alterativas tenemos?
El técnico hizo un repaso de cómo será el ingreso al otoño, con una sequía del verano 2019-2020 que redujo la producción de reservas en primavera y cultivos de primera para ensilar comprometidos por la sequía que perduró hasta fines de enero. Como estrategia de alimentación para el rodeo sugirió:
1) definir una meta productiva y estimar el consumo potencial
2) cuantificar el aporte de pastura
3) definir las necesidades de suplementos.
También se sugirió no sobrepastorear las praderas: 5 cm a partir de marzo, evitar el pastoreo frecuente (2,5 horas en festuca, 3 hojas en avena/raigrás, 10 nudos en alfalfa y 60-70 cm en sorgo forrajero).
Lo ideal sería contar con agua en la parcela. Mendoza también planteó asegurar un mínimo de fibra y conocer la calidad de estas con un monitoreo de variación en porcentaje de materia seca.
La calidad y disponibilidad de agua es otro factor importante, así como también el área de descanso. Una pradera vieja versus un corral de tierra, da una ventaja de 1,3 kg de leche para la primera opción.
“Una buena gestión del pastoreo es clave en situaciones de pocas reservas y concentrados caros”, indicó Mendoza. Y añadió que “el manejo de la alimentación y el confort animal pueden tener más impacto que la formulación de la dieta.
¿Cuánto impacta?
La segunda charla estuvo a cargo del Ing. Agr. Renzo Psiciottano, asesor CREA y se tituló Incrementos de costos: ¿cuánto nos afectará? El experto indicó que los concentrados aumentaron 30% para el segundo semestre del ejercicio (considerando un mix de 80% maíz y 20% soja). Esto implicaría un impacto global del 15% para el ejercicio agrícola que cierra el próximo 30 de junio.
Además, los fertilizantes aumentaron 50% para la zafra (de otoño) en que se consume el 60% del total del fertilizante del año.
El aumento significativo de los insumos considerados se dio en el segundo semestre del ejercicio. Si esto continúa y no se ajustan las relaciones de precios, el impacto se sentirá bastante más en el ejercicio 2021-22, alertó.
Para recuperar el ingreso de capital originalmente proyectado para el ejercicio 2020/21 de US$ 305/ha, el precio promedio del litro de leche debería ser de US$ 0,313 en lugar de los US$ 0,297 proyectados.
