En un comunicado fechado el 20 de mayo, los representantes del Foro Mercosur de la Carne (FMC) manifestaron su “honda preocupación” por la suspensión de las exportaciones argentinas de carne vacuna por 30 días, la que consideran tendrá “graves consecuencias para el desarrollo del país en el futuro”.
El FMC dijo que “la restricción voluntaria a las exportaciones es un instrumento de política comercial que, en este caso, daña al sistema productivo de la cadena cárnica, sector que genera empleo, activa la economía y mejora la inserción internacional competitiva del Mercosur”. Recuerda las “secuelas negativas” de estas prácticas ya implementadas años atrás en el mismo país, las que determinaron “el cierre de empresas frigoríficas, la caída en la producción y la pérdida de puestos de trabajo, lo que afectó tanto al sector productor como al industrial y a los propios consumidores argentinos”.
Argumenta que “está comprobado que el comercio mejora el bienestar de los consumidores y la eficiencia de los productores”.
Por último, el FMC expresa que “en definitiva, se trata de visualizar los beneficios de la producción de carne en términos de su potencial aporte al desarrollo sostenible de los países, tanto en lo económico, en lo social como en lo ambiental, evitando políticas de intervención con restricciones que acarrearán importantes perjuicios a la sociedad en su totalidad”.