En el marco de una gira por el sudeste asiático, el secretario de Bioeconomía argentino, Fernando Vilella, le solicitó al jefe de Gabinete del Gobierno de Japón, Yoshimasa Hayashi, que su país habilite a Argentina para exportar carne vacuna no sólo de la Patagonia (libre de aftosa sin vacunación), sino también del centro y norte del país. Este habría sido el tema prioritario de la reunión, entre otros ligados a nuevas oportunidades en materia de comercio, inversiones y cooperación.
Mientras que la habilitación de la carne patagónica se produjo a mediados de 2018, la del resto del país no ha tenido avances concretos desde 2020. La delegación argentina insistió en que no existen motivos para demorar la apertura y remarcó la importancia de basar todas las medidas sanitarias en criterios científicos.
Japón es el tercer importador mundial de carne después de China y Estados Unidos. Como el stock bovino patagónico no alcanza siquiera para autosustento en la región, las exportaciones hasta ahora son ínfimas: en 2023 se enviaron a Japón tan solo 27,6 toneladas por US$ 228.250.