En el marco de la Expo Prado se dio a conocer que existe un alto porcentaje de muestras que exceden los parámetros de residuos en carne, que están relacionadas con la utilización de ectoparásitos, y se advirtió por parte del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) la necesidad de controlar el tiempo de espera entre el último tratamiento y la faena en la industria.
Claramente este problema no radica únicamente en la carne uruguaya, sino también en otros países y en este caso de uno de los exportadores de carne habilitados para el ingreso en Uruguay como lo es Paraguay.
El Servicio de Nacional de Calidad y Salud Animal (SENACSA) de Paraguay emitió un comunicado a los productores recordando la importancia de respetar los tiempos de espera entre la utilización de la sustancia fipronil, que es de 100 días previo al sacrificio del animal.
En el caso que dicho período de espera sea incumplido por parte de los productores, “implica sanciones a los infractores” al tiempo que también genera graves inconvenientes al programa de control de residuos.