Este martes, tras la reunión del Comité de Política Monetaria (Copom), el Banco Central del Uruguay (BCU) decidió mantener la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 8,5% para consolidar la baja sostenida de la inflación y sus expectativas en el objetivo de 4,5% en el Horizonte de Política Monetaria (HPM).
En junio, la medición de inflación interanual se ubicó en 4,96%, cerca del centro del rango meta y dentro del mismo por 13 meses consecutivos, el período más largo desde la implementación del régimen de metas de inflación.
En tanto, en consistencia con el proceso esperado de convergencia, el promedio trimestral de las expectativas de inflación a dos años se sitúa en 6,1%, por debajo del trimestre anterior, destacándose la reducción de la inflación esperada por las empresas (que recopila el INE) de 7% a 6,2%.
La proyección de inflación promedio se mantiene dentro del rango meta durante los próximos 24 meses y se ubica en el centro del mismo al final del HPM.
Según el comunicado del Copom, en el escenario internacional, en las principales economías se mantiene la desaceleración de la actividad económica. La inflación en Estados Unidos muestra una mejora lenta en su trayectoria de convergencia a la meta. En la región, en Brasil se observan buenas perspectivas para el nivel de actividad y un incremento en las expectativas de inflación. En Argentina, se observa una desaceleración de la inflación en un marco de caída del nivel de actividad.
En Uruguay, la actividad registró un aumento desestacionalizado de 0,9% en el primer trimestre de 2024, ubicándose 0,6% por encima del nivel de un año atrás. Las proyecciones de corto plazo, que recoge el Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE), sugieren que la economía continuaría su crecimiento en los dos trimestres siguientes.
A partir de este panorama, del análisis de los datos y de las proyecciones, el Comité de Política Monetaria (Copom) “valoró positivamente la permanencia de la inflación en torno al centro del rango meta y la convergencia gradual de sus expectativas”.
Por ese motivo, el Directorio del BCU decidió mantener la TPM en 8,5% “con el objetivo de garantizar los esfuerzos para que la inflación y sus expectativas converjan al centro del rango meta al final (4,5%) del Horizonte de Política Monetaria”. Precisamente, en la Encuesta de Expectativas de Inflación de julio, los analistas y agentes económicos prevén una inflación a 5,90% para el horizonte a 24 meses. El año calendario 2024, la inflación sería del 5,5%.
Impacto sobre el dólar
En la operativa cambiara posterior a la decisión del Copom, el dólar en Uruguay prácticamente no se movió. Si bien en el promedio diario subió 0,36%, a $ 40,28, la última operación se pactó a $ 40,22, prácticamente igual al cierre previo (+0,05%). En el acumulado de julio, el tipo de cambio se fortalece 0,7% respecto al cierre de junio. En lo que va del año, el dólar avanza 3,2% y 7,6% en el año móvil.
Los analistas y agentes que respondieron la Encuesta de Expectativas Económicas de julio del BCU prevén un dólar a $ 40,80 para el cierre del año, es decir, apenas 50 centésimos que su cotización actual. Además, prevén que la economía uruguaya se expanda 3,3% en 2024 y 2,5% en 2025.
Por otro lado, en Brasil, el dólar tuvo una suba diaria de 1% frente al real a 5,48 unidades. La reanudación de las preocupaciones sobre el ajuste fiscal en Brasil ejerció presión sobre el real, luego de que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva afirmara que el gobierno no está obligado a cumplir la meta fiscal “si tiene cosas más importantes que hacer”, según Money Times.