“Vinimos a dar la cara, aun sabiendo que no nos iban a recibir con masitas” dijo el equipo del Banco Central del Uruguay (encabezado por su presidente, Diego Labat), al ser recibido por el Consejo de la Federación Rural ayer lunes. El tema de la reunión estaba centrado en el tipo de cambio, que no conforma al sector productivo y que se convierte en un peso adicional al impacto de la sequía.
El presidente de la Federación Rural, Jorge Andrés Rodríguez, al cierre de la reunión dijo a Informe Tardáguila que desde la gremial “aplaudimos la baja de la inflación y la libre fluctuación del dólar”, que es la tarea que se le ha encomendado al Banco Central, pero recalcó que el efecto de un tipo de cambio bajo “a los productores no nos sirve” e indicó que desde su punto de vista la caída en los ingresos del Estado, por el efecto de la sequía, se verá compensada por un ajuste fiscal.
El productor señaló que en el escenario planteado a 24 meses por parte de las autoridades del Banco Central, el tipo de cambio no caerá como lo ha hecho en los últimos 12 meses, pero que el panorama seguirá incambiado, sin expectativas de una recuperación, por lo que dijo: “Tendremos que producir un 25% más para cubrir los costos de 2022” debido al valor del dólar.
Rodriguez dijo que las autoridades reconocieron que el impacto es más grave en la economía de las pequeñas y medianas empresas que tienen una estructura de costos basada en bienes de consumo, dado el peso relativo de la canasta familiar en su estructura de gastos.