El Consejo Europeo aprobó una extensión de 12 meses para la implementación de la Regulación Europea de Deforestación (EUDR) aconsejada por la Comisión Europea. Esta regulación, destinada a combatir la deforestación a través de controles más estrictos en las cadenas de suministro de productos agrícolas, había enfrentado demandas de las ONG para su aplicación inmediata. Sin embargo, la extensión busca evitar problemas en su aplicación y dar claridad a los operadores sobre las normas de cumplimiento.
Se espera que el Parlamento Europeo vote sobre esta extensión en noviembre, mientras que las críticas persisten desde sectores ambientalistas que piden urgencia.
El portal Food Navigator aclara que, en realidad, el EUDR está vigente desde el 29 de junio de 2023 y que lo que se propone posponer son los requerimientos de proporcionar la documentación legal que garantice que la materia prima a ser exportada a la UE no proviene de tierras deforestadas después de 2020.
“El cambio de fecha no afectará de forma sustancial las reglas existentes, que apuntan a minimizar la contribución de la UE a la deforestación y degradación forestal a nivel mundial”, dijo el Consejo Europeo.
El portal expresa que, más allá de las críticas de organizaciones ambientalistas, la postergación de la fecha será aprobada, dado que la entrada en vigor sobre fin de este año sería un fuerte golpe para pequeñas empresas y para los mercados emergentes, dijo el portal. Se puede agregar también la expectativa de fuerte aumento de los precios de los alimentos en los países de la UE debido a la eventual drástica reducción de la oferta.