Recientemente, el Consorcio Regional de Innovación en Lanas Ultrafinas (Crilu) concluyó su período estipulado en el proyecto y junto con la 12ª entrega de carneros a los consorciados hizo el balance del camino recorrido. En ese sentido, el téc. agr. Álvaro Fros, presidente de la Sociedad de Criadores de Merino Australiano del Uruguay (SCMAU), dijo que “estamos muy orgullosos de todo lo sucedido, es un proyecto exitoso, con los objetivos cumplidos, con una medición de impacto económico muy bueno, por lo que todo cierra en que esto sea un éxito y la base para una nueva etapa ”.



Poniéndole números al balance de este largo período de más de 20 años de trabajo en el afinamiento de las lanas, Fros dijo que “en todo este proceso se genera un aumento de US $ 50 millones a los productores, se llegó a un aumento de la producción de lanas finas de 234% y también como raza Merino en el 98 estábamos entre el 10 y 11 por ciento del total de ovinos del país y hoy andamos en el 40%, aproximadamente ”.
El presidente de SCMAU remarcó que estos números son el reflejo claro de que el productor “le encontró la rentabilidad al rubro, hizo su empresa rentable y ha invertido. Porque este proyecto también ha llegado al productor de majadas generales, al productor que está en el campo, en el basalto, grande, chico o medio, eso es parte del éxito de esto ”.
Si bien no existe un dato preciso del micronaje promedio de la raza a nivel, Fros señaló que según el informe de esquilas del Secretariado Uruguayo de la Lana en 1998 el merino estaba en alrededor de 21,8 micras y que actualmente se encuentra en el entorno de las 21 micras. Además, destacó que cada vez se ven más lotes de lana entre 16 y 17 micras, que “antes había uno o dos lotes y ahora hay muchos más, y son lotes grandes, medios y chicos, porque la gente vio que mejorando la rentabilidad es un rubro muy bueno y el resultado final ha sido excelente ”.
La pregunta clásica es "¿hay que seguir afinando?" y frente a la misma siempre se responde que cada productor debe hacer sus propios números y trazar sus objetivos. Además de esto, Fros agregó que realizó se realizó un proyecto FPTA con INIA, denominado Crilu Merino $, en el cual se demostró que “los productores CREA del basalto, cuanto más fina la lana, más plata hacían dentro de sus empresas, o sea que el mercado nos dice eso ”.
El presidente de la SCMAU recordó que "en todo este proceso se han roto barreras y mitos que decían que afinando perdíamos peso de vellón y peso de cuerpo. La verdad que hoy tenemos animales que son más finos y más pesados. Hemos demostrado que eso se puede hacer y se hace ”. Fros remarcó que“ las señales son claras, las herramientas hoy están, después de cada productor, dentro de su predio, sabrá dónde pararse ”.

Nota de foto: La entrega de carneros se realizó por primera vez en la Unidad Glencoe del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) donde se encuentra el plantel de Crilu, por lo que fue momento de reconocer a todos los consorciados, pero también a todos los funcionarios de INIA que forman parte del proyecto y que hacen que el mismo funcione en el día a día.