Los productores lecheros tendrán que lidiar en esta zafra de siembra de verdeos y cultivos de otoño con aumentos de costos, algo que viene desafiando a la producción primaria aún con una recuperación en el precio de la leche al tambero en los últimos meses. La implantación de verdeos y praderas demandará una inversión piso de entre US$ 350 y US$ 410 por hectárea.

Así lo refleja un trabajo técnico que elaboró la Sociedad de Fomento Rural Colonia Valdense (Sofoval), que cuantificó los costos para la implantación de diferentes pasturas.

“El negocio de producción de semilleros en 2021, fundamentalmente las gramíneas —todas certificadas por ley— compitió con cultivos agrícolas invernales de muy buenos márgenes, determinando una menor superficie, disponibilidad y encarecimiento de las semillas de avenas y raigrases en la presente zafra”, alertó Sofoval en su análisis de Costos: Zafra Forrajeras 2022.

Para el caso de las leguminosas —producidas aún en esquemas sin certificación— la alfalfa llega con poca semilla de zafras anteriores y semilleros que se vieron perjudicados por los déficits hídricos muy importantes en diciembre. En ese sentido, Sofoval sostiene que, si bien la provisión será correcta, también aumenta su precio respecto a la campaña pasada. Algo similar ocurrirá con el lotus. En tanto, el trébol rojo tiene una situación “intermedia”. Las anuales como el trébol Alejandrino y la vicia van conquistando su espacio y se espera atender la demanda.

“Está claro que el mayor impacto en el aumento de los costos no proviene de las semillas, sino de lo ocurrido con el precio de los fertilizantes y algunos agroquímicos claves”, advierte Sofoval.

La empresa espera que la demanda “sea importante” producto de precios tonificados tanto para la carne como para leche, y de la “cada vez más clara respuesta de la agricultura a la implementación de rotaciones con cultivos forrajeros que permiten la incorporación y reciclado de nutrientes y atacar el cada vez mayor problema del control de malezas”.

La sociedad explicó que los valores que compartió son “referenciales” y están en pleno proceso de fijación. De hecho, la asesora técnica de productores lecheros, la Ing. Agr. Magela Santoro, comentó a La Lechera que, a modo de ejemplo, el fertilizante 18/45 —el más utilizado para praderas y alfalfas— superó los US$ 1.100 la tonelada en el mercado, un precio nunca registrado. “Eso va a marcar muchísimo esta siembra de otoño”, aseguró.

Además, la incertidumbre por la disparada de los costos se agravó en las últimas semanas por la invasión de Rusia a Ucrania, ya que el primero es un fuerte proveedor de fertilizantes para Uruguay. El Ministerio de Ganadería está entablando contacto junto con los actores privados para encontrar otros proveedores internacionales para la provisión de fertilizantes al país.

 

Referencias de precios

De acuerdo con el trabajo de Sofoval, el costo de implantar una hectárea (ha) de avena con siembra directa será de unos US$ 409 en esta campaña. El precio de la semilla de la avena curada (Tiamextoxan) es de US$ 0,89 por kg, lo que determina una erogación de US$ 89 para 100 kg por ha. A eso hay que sumarle unos US$/ha 190 entre fertilizante y urea con azufre, mientras que la factura de agroquímicos y herbicidas ronda US$/ha 38. En el caso de las labores, el costo de la siembra es de unos US$ 55/ha, que, si se le agrega gasoil, refertilización y aplicación de herbicidas, totaliza unos US$/ha 93.

Por su parte, en el caso del raigrás su costo para esta campaña ronda los US$/ha 396.

Para la alfalfa con dactylis, el costo de implantación estimado por Sofoval —siempre con siembra directa— es de unos US$/ha 376. El costo de la semilla de ambas variedades con una siembra de 15 y 10 kg/ha, respectivamente, es de US$/ha 143, con una factura total de insumos de US$/ha 299. Las labores (incluyendo gasoil) se estimaron en unos US$/ha 77.

Finalmente, para pradera con festuca, trébol blanco y lotus, se estimó un costo entre insumos y siembra de US$ 350/ha. (Ver detalle en cuadros)