Tras las llegadas de las lluvias tan esperadas, las pérdidas registradas en praderas y verdeos en el verano por la sequía y la baja disponibilidad de forraje del campo natural, muchos productores deben salir a sembrar nuevamente.

El Ing. Agr. Federico Nolla de PPG Wrigtson Seeds indicó que los números están en una buena posición para que los productores puedan realizar inversiones de siembra este año, ya que los costos para instalar una pradera han disminuido entre 15% y 20% en comparación con el año pasado.

Este descenso se debe a que los precios de los fertilizantes han bajado significativamente. En cuanto a la semilla, Nolla menciona que en algunas especies puede estar un poco más cara, pero en general no es un factor importante para considerar en la instalación de la pradera.

Respecto a la disponibilidad de semillas, Nolla comentó que su empresa ha tenido una buena cosecha de avena y raigrás, pero se han visto situaciones críticas en la producción de semilleros de festuca. En cuanto a las leguminosas, Nolla advirtió que podrían estar un poco más escasas debido a que se cosechan en diciembre.

En resumen, la situación para sembrar praderas parece ser favorable en cuanto a los costos de instalación, aunque la disponibilidad de algunas semillas podría verse afectada.