Según datos difundidos por la Secretaría de Comercio Exterior (SECEX) de Brasil, las importaciones brasileñas de productos lácteos crecieron considerablemente en julio; se internalizaron aproximadamente 95 millones de litros de leche equivalente en el mes, con un incremento del 63% con relación al volumen del mes anterior y un 26% mayor que con relación a julio/2019.
En contraste, las exportaciones brasileñas también crecieron; se exportaron 16,7 millones de litros en el mes, 38% más que en junio de este año y 95% más que julio/2019. Ante estas cifras, la balanza comercial de productos lácteos fue de -78 millones de litros (en equivalente de leche), un aumento del 69% en el déficit respecto al 20 jun/y del 17% respecto a julio del año pasado. Es importante resaltar que este valor también representa el saldo más bajo (más negativo) del año como se puede apreciar en el siguiente gráfico.
El crecimiento de las importaciones se debe al fuerte aumento de la demanda en el mercado brasileño y la menor disponibilidad de leche local, lo que ha venido aumentando los precios de la leche en Brasil. Los principales países que abastecen de leche a Brasil, como es habitual, fueron Argentina y Uruguay.
Según datos aduaneros, Uruguay exportó unas 3.500 toneladas de leche en polvo entera a ese mercado (en total Brasil compró 6.500 toneladas), otras 400 de leche en polvo descremada y unas 500 toneladas de quesos en julio.
Además, es importante señalar que la tendencia al aumento de los precios nacionales ha hecho que el producto importado sea más competitivo; el precio promedio nacional de la leche al contado recolectada por MilkPoint Mercado en julio fue de R$ 2,26 por litro, mientras que la leche importada se internalizó a un precio promedio equivalente a la leche fresca de R$ 2,02 por litro.
Entre los derivados lácteos importados a Brasil, la leche entera en polvo y el queso son los de mayor participación, además, también mostraron un aumento significativo en volumen respecto al mes anterior: 86% y 73%, respectivamente.