Desde principios de 2020 hasta 2026 el potencial de participación de Uruguay dentro de la cuota 481 irá en gradual descenso, en la medida que caerá anualmente el volumen del cual puede participar. Aunque esto ha determinado una disminución del volumen comercializado por Uruguay dentro del cupo, desde el punto de vista relativo su incidencia ha crecido, dado que el descenso es inferior al de países competidores y se mantiene como el principal proveedor, incluso por encima de Estados Unidos, quien cuenta con una parte de la cuota para trabajar de forma exclusiva.

Según datos de la Comisión Europea, entre el 1 de julio de 2020 y el pasado 12 de mayo ingresaron a Europa dentro de la cuota 33.381 toneladas, de las cuales llegaron desde Uruguay 11.935 toneladas, 35% del total. Por lo tanto, más de 1 de cada 3 kilos utilizados del cupo arancelario fue con carne uruguaya. El volumen es levemente inferior a las 12.642 toneladas que Uruguay exportó en 2019/20, pero hay que tener en cuenta que sus posibilidades de participación cayeron en 2.250 toneladas, por lo que creció desde el punto de vista relativo.

Durante el segundo semestre de 2020 Uruguay pudo participar de un volumen de 13.250 toneladas y en el primero del corriente de 11.000 toneladas. Por lo tanto, las casi 12 mil toneladas embarcadas son prácticamente la mitad del total. El resto lo utilizan fundamentalmente Australia (6.016 t) y Argentina (5.757 t) y en mucho menor medida Nueva Zelanda (203 t) y Canadá (4 t).

Mientras tanto, ingresaron desde Estados Unidos 9.916 toneladas en el período. Este país ha contado con un cupo exclusivo de 20.750 toneladas, por lo que al terminar el ejercicio seguramente esté utilizando cerca de la mitad.

Es inevitable que las ventas de Uruguay dentro de esta cuota de animales terminados en corrales de engorde sigan disminuyendo. A partir de 2026 solo podrá colocar 10.000 toneladas como máximo, volumen del que participarán también Australia y Argentina. Por lo tanto, habrá que seguir buscando alternativas para este producto que es un gran dinamizador de la ganadería uruguaya. Pero, al menos en principio, la caída de las ventas dentro de este cupo parece que no serán tan rápidas como en principio de podía prever, dado que Uruguay está mostrando un gran posicionamiento que le permitió ganar porciones de mercado que anteriormente los utilizaban sus competidores.