Buena parte de la industria frigorífica comienza a enfocarse en la producción dentro de la ventana de cuota europea 481, de animales terminados a grano, por lo que reduce sus compras de animales de campo y trabaja con lotes adquiridos a los corrales con anticipación o con la producción de sus propios encierros. Por lo tanto, la demanda se contrae y los precios bajan. Siempre pasa lo mismo.
Ayer, la amplia mayoría de la industria frigorífica estaba retirada del mercado y quienes pasaban precios ofrecían cotizaciones significativamente inferiores a las que rigieron hasta la semana pasada.
“Tengo un lote de animales excepcionales, unas 100 cabezas, y hoy no tengo precio”, dijo un intermediario consultado en la tarde de ayer.
Los últimos negocios por novillos especiales se hicieron hasta US$ 3,60 el kilo carcasa, pero ayer ese precio no estaba en el mercado. No solo sucede con los novillos, tampoco hay interés en compra de vacas o vaquillonas. “Pasa lo mismo en todas las categorías”, explicó otro intermediario.
En las anteriores cuatro ventanas de cuota pasó lo mismo, con precios en baja que oscilaron entre 7 y 40 centavos en el período, con un promedio de caída de US$ 21 centavos por kilo carcasa para los novillos.
La ventana de cuota se ha achicado con la reducción de la posibilidad de participación de Uruguay dentro de la misma. Además, se concentró. No son más de tres semanas y media: la última semana y media del primer mes del trimestre y las dos primeras del segundo. La carne debe ser desaduanada en destino el primer día hábil del siguiente trimestre (en este caso, el 1º de julio), por lo que debe llegar antes al puerto europeo.
Por lo tanto, en la planificación de la oferta es importante tener en cuenta estos cuatro períodos del año en los que la demanda cae significativamente, con la consecuente baja de los precios del ganado a faena. Las fechas para este año se ven en el siguiente calendario.
