La firma especialista en bombeo solar, Kivoy, está celebrando su 10° aniversario y lo celebra con distintos beneficios para sus clientes.

Alberto Fernández, uno de los responsables de la misma, representante de la firma alemana Lorentz, explicó que en el inicio la penetración al mercado de un producto que en su momento era disruptivo, fue compleja, incluso vendiendo la primera bomba a los 8 meses de iniciar su participación en el mercado, mientras que hoy venden 20 al mes.

El especialista definió como una “quijotada”, porque no era fácil innovar en energías renovables y en el interior profundo del Uruguay, en una localidad como Cardona, apostando al cambio de matriz y de paradigma, con la representación de una firma europea, que fue una antes y un después, aprendiendo la cultura del alemana en el trabajo, yendo a ese país a capacitarse.

La seriedad, el trabajo y el servicio pos venta, que especializó a los representantes, permitió un crecimiento paso a paso.

“Hay mucha historia en estos años, con mucho sacrificio y sin sabores, y era entendible que la gente al principio no confiara en el producto, y fue un trabajo arduo, pero estábamos convencidos que en Uruguay se iba a cambiar de paradigma, y decimos con orgullo que cambiamos el sistema de bombeo en el país” explicó Fernández.

En el 2011 inició la firma en la Expoactiva, y hoy cuenta con una red de 40 distribuidores en Uruguay, con instaladores capacitados cerca de cualquier establecimiento y clientes en el norte con más de 20 bombas instaladas.

“Fue un camino largo y no fue fácil, ni llegamos todavía a ningún lado, y hoy nos dedicamos al bombeo solar y distribución de agua” dijo, agregando que “el productor se beneficia con una bomba solar, con energías renovables y el respaldo también importante y tener garantía en todo el implemento es una característica de nuestra empresa, por el respaldo, la garantía y seguridad, de un implemento que es móvil y se instala en un día”.

El bombeo solar es una ventaja y una necesidad, porque hoy los granos valen, la carne vale, y si hay agua abajo “tenemos que sacarla para regar y darle agua a los animales”, porque “cuando comenzamos en 2011 un panel solar costaba US$ 800 y un novillo valía US$ 200, mientras que hoy un panel solar cuesta US$ 200, y todo sabemos lo que vale un novillo”.

La empresa se especialista en todo lo que está relacionado con bombeo de agua, bombas solares, bombas eléctricas de Alemania, España e Italia, y por este mes van a tener importante descuentos.

“Tenemos 700 sistemas instalados en Uruguay y con estos clientes también vamos a tener una atención” adelantó Fernández.

Además se puesta a que noviembre sea el mes de la sustentabilidad y el bombeo solar, están conversando con el Gobierno y la intendencia de Soriano, para que empresas puedan apoyar con promociones, difundiendo más este tipo de tecnologías.

Acceda a más información de la empresa en www.kivoy.com.uy.