El fiscal jefe de Nueva York presentó una demanda contra JBS. Letitia James acusa a la empresa de presentar un objetivo climático inalcanzable y exige que se obligue a dejar de revelarlo, bajo pena de una multa de 5.000 dólares, más 1.000 dólares por cada infracción en la que incurra contra la ley estadounidense.
En 2021, el gigante cárnico brasileño anunció su compromiso de convertirse en neutral en emisiones de gases de efecto invernadero (“cero neto”) para 2040. En 2021, la compañía anunció que sus emisiones totales de gases de efecto invernadero ascendieron a 71 millones de toneladas de carbono equivalente.
El compromiso climático de JBS se aplica a todas sus operaciones globales, no solo en Brasil, y fue validado por la iniciativa Science-Based Targets (SBTi), responsable de validar los planes de acción climática de las empresas en todo el mundo.
Pese a ello, el fiscal general afirma que JBS no podría alcanzar el nivel de neutralidad de emisiones porque no existirían “prácticas agrícolas probadas para reducir a cero las emisiones de gases de efecto invernadero”. Además, compensar las emisiones de la empresa con créditos de carbono sería un costo “sin precedentes”. Afirma, además, que la empresa planea aumentar su producción de carne en los próximos años, lo que sería contradictorio con su objetivo de neutralizar sus emisiones.
El fiscal general afirma que los consumidores estadounidenses prefieren empresas con compromisos medioambientales y pagan más por sus productos. Por lo tanto, según ella, la afirmación de JBS de que las emisiones serán “cero netas” iría en contra de la ley comercial general en los Estados Unidos y sería calificada de “fraude”.
JBS USA dijo en un comunicado que se toma “muy en serio” su compromiso climático y que no está de acuerdo con la acción del fiscal general, la que se produce en medio del intento de JBS de cotizar sus acciones en Estados Unidos, lo que enfrenta la resistencia de los ganaderos locales, la industria cárnica nacional y los ambientalistas, consignó Globo Rural.