Fernando Indarte, uno de los principales de la firma Indarte Negocios Rurales, participa de la tercera entrega del espacio Momento Ganadero, y se refirió a los precios, el mercado y las perspectivas.
¿Cómo está analizando la actualidad de la producción ganadera en el país?
No imaginábamos ni cerca los precios que tenemos actualmente, subió incluso mucho más rápido que en el año 2019 y estamos alcanzando valores históricamente altos como referencia actual de US$ 4 por el novillo.
Inmejorable el momento, porque está bien el clima, está bien la cadena, la cría y está bien la reposición. Tenemos 3 millones de terneros para vender y se están vendiendo todos, con una leve corrección a la baja, que es lógica por el momento del año, con todas las categorías grandes valiendo mucho, lo cual es lógico porque el ganado gordo vale. Hay gran avidez de la industria, con faenas altas, 30% por encima del año anterior, con una demanda mundial firme y del lado de la oferta tenemos a Argentina afuera de la cancha, Australia bajando la exportación y Brasil un poco menos respecto al año pasado.
¿Cuáles son, a su criterio, las fortalezas actuales del sector, tanto en la producción ganadera como en la industrialización y comercialización de la carne?
Tenemos muy buena calidad de carne, predominando las razas británicas, y en el mundo es reconocida nuestra carne, tanto la que se produce a pasto como la que se produce a grano, hemos mejorado de manera importante los indicadores de producción, como la edad de faena, cantidad de terneros y kilos producidos, lo que es una fortaleza que mejora año a año, con buena genética.
La industria está bien posicionada a nivel mundial, han hecho muchos esfuerzos junto con INAC para ir a vender las carnes nuestras por el mundo y se nota que de 20 años a esta parte se han puesto a rueda en el comercio mundial.
¿Y las debilidades?
Tenemos muy concentradas las ventas en China, que se lleva gran parte de la producción, y ya nos pasó el año pasado que pestañó y nos complicó, pero tampoco hay grandes cosas para hacer porque todo el mundo está pasando esto.
Tenemos decenas de destinos para colocar la carne, y como dice el dicho, tenemos más mercados que novillos.
¿Considera que el precio que ofrece la industria actualmente es justo con el momento productivo?
El precio justo es complicado de analizar, porque es una palabra complicada. Hay dos indicadores que dicen que el valor del ganado va estrechamente atado al valor de la exportación. Más tarde o más temprano sube la exportación y sube el ganado, baja el precio de la exportación, baja el del ganado. Tenemos el Novillo Tipo en INAC que está en un 80/20, por lo tanto venimos en la relación histórica entre lo que recibe el productor y lo que recibe la industria.
El otro indicador, que hace la Federación Rural, ve respecto a la exportación cuanto se debería pagar el novillo, la vaca y muestra que el novillo está pagando lo que se debería y la vaca tiene US$ 5 centavos más de lo que se debería de pagar.
El Negocio del Negocio: Dentro de la cadena cárnica toda ¿Cuál considera que es el sector que hoy en día tiene mayor rédito económico?
Hoy no veo a alguien más débil ni a nadie que gane más dentro del negocio. El criador mejoró mucho sus indicadores productivos, mejoró mucho el precio, tiene la válvula de escape de la exportación, sino queda todo en Uruguay. Al invernador le ha mejorado mucho la relación flaco/gordo en los últimos años, pero hay momentos en los que le queda muy bajo su margen. Por su parte los frigoríficos que manejan negocios muy grandes y complejos, tienen sus ganancias o pérdidas dependiendo del mercado. A esta altura se ha acomodado parejo en todos lados.
¿Cómo se proyectan los próximos meses en materia productiva?
Lo veo muy bien, pese a que se viene el invierno que es la etapa de menor producción de forraje, aumentan los encierres que todos los años complementa esto y ha sido estructural la producción de gado a grano que es importante para la ganadería uruguaya. El productor cuando tiene valores produce y va a estar enfocado en producir más. Va a ser un año positivo en precio y volúmenes, y esta vez vemos que hay mucha faena y precios altos, así que hay que acordarse de esto y festejarlo.