“Depende del agua, es lo que tracciona todo”, afirmó José Manuel Rubio, integrante de Megaagro, al ser consultado sobre cómo prevé se comporte el mercado ganadero en los próximos días y semanas.
Respecto a la oferta, Rubio comentó que muchos productores que estaban de licencia en la primera semana de enero retornaron a sus predios y, al observar la situación forrajera, están más “apurados” por vender hacienda. De todas formas, aseguró que la oferta es “poca”, para lo que dijo que hay dos factores jugando: por un lado, los precios no son tentadores y, por otro, hay productores que todavía tienen la posibilidad de esperar una mejora de los valores.
Rubio dijo que hay plantas que pagan US$ 3,45 a US$ 3,50 por lotes de novillos excepcionales. En general, son las que están trabajando con equipos kosher. En los demás casos el eje de los negocios es de US$ 3,40 el kilo carcasa.
Teniendo en cuenta la actitud de la demanda, Rubio no consideró probable que los precios sigan en alza. “Más allá de la suba de la última semana, la demanda está tranquila”, expresó.
Las vacas gordas se venden a US$ 3,10-3,15 el kilo, con lotes excepcionales, con carcasas de más de 240 kilos, que pueden llegar a US$ 3,20.
Respecto al mercado del novillo liviano y las vaquillonas, que tienen como destino prioritario el mercado interno, el integrante de Megaagro dijo que está “movido” y que la buena demanda siguió más allá de las fiestas de fin de año. Los novillos de abasto se venden en un eje de US$ 3,35 y las vaquillonas sobre una base de US$ 3,25 el kilo carcasa, referencias a levantar y con pago a 45 días.