Por Rafael Tardáguila, desde Shanghái
Lo más importante es haber podido volver a la presencialidad de la feria, con mucha gente participando en el pabellón de la proteína animal, pero con un mercado todavía muy tímido, especulando previo al verano, opinó Marcelo Secco, CEO de Marfrig en Uruguay, desde la feria del SIAL en Shanghái.
El industrial consideró que los precios de exportación a China deberían estar actualmente en los pisos. Coincidió en que lo que aducen los importadores es que todavía hay un stock importante de carne en China, por lo que están siendo muy cautelosos en el proceso de reapertura, que lleva a que se sigan viendo todavía locales y restaurantes cerrado. “Fue un proceso muy duro”, enfatizó.
Sin embargo, el industrial se mostró optimista de cara al futuro del mercado. “Quizás no se dará en los próximos dos meses, pero se puede pensar para el segundo semestre una demanda más fuerte”, vaticinó.
Por otro lado, Secco dijo que la feria es una instancia trascendente para ver en qué está la competencia, Brasil y Argentina, la presencia de Australia, tomar el termómetro de la presión vendedora que lidera Brasil. Este país maneja una agenda de habilitación de nuevas plantas, por lo que seguramente seguirá embarcando 40 a 60 mil toneladas mensuales a China. “Eso presiona en el mercado y habrá que ver cómo se ordena el flujo de stock y una dinámica de demanda mejor; eso va a ser lo que va a acomodar al mercado”, opinó el principal de Marfrig en Uruguay.
Respecto a las condiciones de oferta con que el complejo cárnico uruguayo enfrenta esta situación, Secco dijo que en cuanto a la actividad “es lo más previsible”, porque “sabemos que hay poco”. Consideró que la caída de la faena en el invierno puede ser todavía superior al 20% que se lleva en el acumulado del año, como consecuencia de la situación de sequía que se vivió y que sigue sin resolverse.
“Habrá poca oferta, la demanda del principal mercado no está dinámica, Brasil ofrece con precios de hacienda más barata… por lo que sabemos que vamos a pasar un invierno con una situación de tensión entre la poca oferta y un mercado que estará intentando reacomodarse”, expresó.
El precio de la hacienda tiene una alta correlación con el de exportación. “Ojalá sea estable”, dijo Secco. Proyectó para los próximos meses un valor de la tonelada exportada en el entorno de los US$/t 4.200-4.300, lo que llevaría a un precio del novillo “por debajo de los US$ 4 por kilo carcasa”.
Debido a la escasez prevista para los próximos meses, Marfrig tiene previsto a partir de la semana que viene comenzar con el programa de licencias de plantas grandes.