La encuesta mensual del Instituto Plan Agropecuario (IPA) con base en la Red de Información Nacional Ganadera (RING) da cuenta de una drástica mejora en las condiciones forrajeras de los campos en el país, lo que impacta directamente en el estado del rodeo y en la aceleración de la terminación de animales provenientes de pasturas, muy demorada en los últimos meses.

De acuerdo con la encuesta de setiembre-octubre, 54% de los productores dijo tener una altura del pasto de más de 5 centímetros, contra solo 25% del año pasado (por el impacto de la sequía), pero también significativamente por encima de los dos años anteriores.

Esto impacta lógicamente en el estado de los animales; 48% de los productores dijo que su rodeo de cría tiene un estado de más de 4.

Pero no solo se ha producido una mejora sustancial del estado del campo natural, sino también de las pasturas sembradas o mejoradas. Un 60% de los productores que cuentan con verdeos dijo que estaban en estado bueno o muy bueno y 77% dijo que las praderas permanentes estaban en un estado bueno o muy bueno. El cambio es sustancial frente al mes anterior, cuando 62% de las respuestas eran que los verdeos estaban regulares o mal y, en el caso de las praderas, 53% estaban en regular o mal estado.

Esto, sin dudas, impactará sobre la cantidad de ganado que empiecen a ofrecer las pasturas en pocas semanas. Quizás eso se dé a partir de mediados de noviembre, luego de 4-6 semanas con el ganado formado metiendo kilos de forma acelerada para llegar a peso de faena. Además, es un momento del año en el que muchos productores deciden la venta, dado que —plazo de pago mediante— aseguran ingresos para cubrir los gastos adicionales de fin de año y vacaciones.

Qué impacto tendrá eso sobre el mercado está por verse. Esa mayor oferta coincidirá con el regreso de los equipos kosher a la región, a la vez que siempre se da un aumento de la demanda interna para las fiestas, por lo que es factible que no tenga un impacto muy marcado a la baja. Pero, seguramente, impedirá que los precios sigan subiendo mucho más allá de los US$ 4 el kilo. Más allá de la mejora de los precios que se lograron en la feria del Sial gracias a la firme postura de los exportadores brasileños de elevar sus precios de venta y a la sólida demanda de Estados Unidos, los valores de exportación no serían lo suficientemente altos por el momento como para sostener precios del ganado a faena mucho más arriba que los actuales.

Después, habrá que ver de qué forma sigue evolucionando el mercado internacional, así como la oferta interna, pero las condiciones del mercado siguen luciendo favorables para los precios de la hacienda a faena el año próximo, superado ese momento coyuntural de mayor oferta que se dará dentro de 3-4 semanas.