Tras una reunión de la Foica con los responsables del grupo Sundiro, propietario de los frigoríficos Lorsinal y Rosario, al panorama para la reapertura de estas plantas volvió a la incertidumbre y no volverán a operar desde enero como en su momento había trascendido.

El sindicato recibió malas noticias sobre el cobro el cobro de créditos laborales (licencias, aguinaldos, entre otros) pendientes que, en teoría, se iban a cubrir con la venta de unos 300 mil kg de carne que el grupo tenía en cámaras de frío.

“Recibimos un mazazo. Nos comunicaron que por enero y febrero no va a ver actividad y para adelante no tienen una fecha formal (para la reapertura)”, declaró ayer al programa 100% Mercados el presidente de la Foica, Martín Cardozo.

Por otro lado, si bien la empresa informó que ya había comercializado el 60% de la carne que tenía en cámaras, un cliente del abasto uruguayo de San José que había adquirido esa mercadería no había cumplido con el pago, cuya fecha límite era el 15 de diciembre. No obstante, en la tardecita de ayer se le comunicó por parte del Ministerio de Trabajo a la Foica que se había logrado el cobro del 50% de lo adeudado, informó Cardozo a Informe Tardáguila. Con ese dinero, se pagarán los aguinaldos pendientes de los trabajadores de Lorsinal y Rosario este miércoles. “El restante 50% se pagaría en el correr de la próxima semana”, acotó Cardozo.

Por otro lado, el grupo Sundiro le informó a la Foica que, si no se logra revertir el corte de la luz previsto por UTE para esta semana, la empresa deberá sacar fondos de esa carne que comercializó para evitar quedar sin suministro eléctrico en sus instalaciones, lo que reduciría el monto disponible para cubrir los créditos laborales pendientes con sus trabajadores. Cardozo comentó que el grupo Sundiro está negociando con el Ministerio de Industria para ver si se logra extender la decisión de corte de suministro por parte de UTE.