Durante un evento que se desarrolló por YouTube, el Dr. Esteban Turic, presentó la experiencia de Biogénesis Bagó, una empresa que tras convertirse en un referente mundial para la erradicación y control de la fiebre aftosa, logró globalizar sus tecnologías y “dar el salto” hacia el continente asiático, donde hoy exporta gran cantidad de productos y también produce vacunas antiaftosa en su planta de China.
“Nuestra experiencia en China llevó varios años de conocimiento profundo de la cultura de negocios y de producción hasta que logramos tener nuestra propia planta de producción de vacuna antiaftosa. Por estar inmersos en ese mercado,tuvimos la oportunidad de vincularnos técnica y comercialmente con el sector de producción porcina, que hasta 2018 constituía el 50% del rodeo mundial de cerdos. La Peste Porcina Africana ha tenido y tiene aún hoy un impacto enorme -tal vez solapada por la crisis del coronavirus, pero sigue siendo un problema importante que hasta la fecha no tiene solución a través de vacunas.”, resaltó quien ya es considerado un “especialista” en esta patología por estar muy cerca del sector productivo chino.
Desde el primer reporte enagosto del 2018 cuando se declararon los primeros brotes, y hasta fines de 2019,la población de madres (parámetro para medir la población porcina) en las granjas disminuyó a 20millones, lo que se vio reflejado en una caída de 43% de la producción (alrededor de 150 millones) y todo esto hizo que los precios cayeran porque la gente tenía temor de consumir carne de cerdo.
Para poder abastecer a su población, el gobierno chino intentó mantener el stock a través de una política de promoción de inversiones dentro de China, de la que participan los principales productores, mientras que los más pequeños y menos tecnificados sufrieron aún más el impacto de la crisis.Aún así -y sin vacuna en un futuro próximo- no llegarían a satisfacer la demanda de su población a través de la promoción de inversiones dentro de China. Es por eso que, a partir de esa restricción, las autoridades chinas plantean la opción de fomentar inversiones por fuera de su territorio, en países que reúnan las características requeridas en relación al status sanitario y las condiciones de producción. Es allí donde hoy Argentina y los países de la región tienen una oportunidad importante que requiere trabajar en un plan de acciónpúblico- privado para atraer inversiones para tener saldos exportables. Esto obviamente redundará en la generación de empleo formal y calificado, y un nuevo modelo de producción más tecnificado que permitirá agregar valor a las exportaciones de la región.
Turic remarcó que “en Argentina y la región hemos contribuido a través de nuestras tecnologías a mejorar la productividad e inclusive a la apertura de mercados internacionales para nuestras carnes, lácteos y también para la genética. El estatus sanitario libre de aftosa con vacunación que consiguió el país fue, en parte, porque había una vacuna de calidad, que se abastecía regularmente y en las cantidades necesarias”.
Con respecto a las nuevas pandemias, el ejecutivo destacó: “cambiarán las formas de producir, se requerirán estándares más altos en materia de bioseguridad, que son parte constitutiva de Biogénesis Bagó, ya que esos estándares de clase mundial fueron los que le permitieron a la compañía abrirse al mundo y acceder a nuevos mercados. Recordemos que somos la única empresa extranjera en establecer una planta de vacuna antiaftosa en China”
Durante el mismo evento en el que se abordaron cuestiones relacionadas con las oportunidades que tiene Argentina para proveer de alimentos y tecnología al mundo, uno de los accionistas de Biogénesis Bagó y fundador del Grupo Insud, Hugo Sigman, conversó acerca de los avances de la ciencia en relación alCovid 19, en un contexto de mucha incertidumbre respecto a su comportamiento. A pesar de ello, el grupo que lidera participa -a través de algunas de sus empresas- en diferentes estudios que buscan probar la eficacia de ciertas drogas para prevenir o curar el coronavirus. Entre ellos se destacan la producción de sueros equinos y la creación de una proteína RBV y un estudio sobrela utilización de ivermectina que ya está en marcha.
Sigman también destacó la gran oportunidad que tiene Argentina de mejorar la producción porcina, a través de la experiencia que pueden aportar los productores asiáticos que cuentan con un alto nivel de tecnificación de sus granjas.