El balance de la semana dejó bajas generalizadas para los precios de los granos en Chicago, donde entre otros factores influyeron la firmeza del dólar contra el real y el euro, además de exportaciones estadounidenses insuficientes para cumplir con las metas de ventas fijadas por el USDA. Si bien el clima no tuvo una influencia determinante, la falta de humedad en Iowa y en Kansas comienza a preocupar a los productores de granos gruesos y de trigos de invierno.
Los precios de la soja cayeron otra vez durante la semana en Chicago, donde los contratos mayo y julio perdieron 2% y 1,77%, al pasar de 431,37 a 422,74 y de 436,06 a 428,34 dólares por tonelada. En las últimas cuatro semanas la moneda de Brasil se depreció un 4,07% frente al dólar, tras variar de 4,9998 a 5,2031 reales por dólar, aunque el retroceso podría haber sido mayor de no mediar un repunte el viernes. Tanto es así que martes la paridad marcó al cierre de la jornada un nivel de 5,2826 reales por dólar. Este prolongado movimiento de las monedas, cuando la cosecha de soja avanzó sobre el 89,17% del área apta según el relevamiento publicado en el cierre de la semana por Patria Agronegocios, sigue estimulando un mayor volumen de ventas de los productores, que procuran usufructuar el momento para recibir más reales por sus granos, y acentúa la competitividad de las exportaciones del principal proveedor mundial de soja.
El mejor reflejo de esto fue la actualización semanal de las estimaciones de exportaciones brasileñas, donde la Asociación Nacional de Exportadores de Cereales calculó que en abril las ventas de poroto de soja se ubicarían en un rango de entre 13 y 14,35 millones de toneladas, frente a los 12,73 millones calculados en su reporte anterior, a los 13,56 millones de marzo y a los 14,05 millones de abril de 2023. En cuanto a las exportaciones de harina de soja, la entidad las proyectó para abril en 2,58 millones de toneladas, arriba de los 2,45 millones previstos la semana pasada, de los 1,76 millones del mes anterior y de los 1,74 millones del cuarto mes del año anterior. Más allá del interés de los operadores sobre la evolución del clima sobre el Medio Oeste, la paridad real/dólar es por estos días el principal factor de influencia para la formación de los precios de la soja en Chicago.
Por su parte, tras caer en cuatro de las cinco ruedas, el maíz terminó la semana con leves bajas en Chicago, donde los contratos mayo y julio resignaron 0,46% y 0,95%, al pasar de 171,45 a 170,66 y de 176,07 a 174,40 dólares por tonelada. Además de la presión que sigue ejerciendo la abundante oferta que ingresa en el circuito comercial de EEEUU, durante la primera parte de la semana tuvo influencia en la tónica negativa el clima, por lluvias que se concentraron sobre el oeste del cinturón sojero/maicero. Sin embargo, ese factor apuntaló la mejora el viernes, luego de que los necesarios aportes de humedad desaparecieron en los hechos, más allá de los pronósticos.
Finalmente, con saldo negativo cerraron la semana los precios del trigo en Estados Unidos. En efecto, las posiciones mayo y julio en Chicago perdieron 1,03% y 0,70%, al pasar de 204,27 a 202,16 y de 209,69 a 208,22 dólares por tonelada. Fuente: Granar Research