El litoral norte del país ha atravesado un invierno beneficioso para los cultivos, salvo en el último mes cuando las precipitaciones han sido escasas. Sin embargo, las expectativas son de rendimientos de 3.000 a 3.500 kilos, tanto en trigo como cebada, en esta zona del país, según estimó el Ing. Agr. Martín Córdoba, de Cooperativa Calsal.
El profesional dijo que en esta recta final de la zafra de invierno “tenemos los cultivos en muy buen estado sanitario y de desarrollo general, con buenos potenciales de rendimiento”. Al mismo tiempo indicó que “en este último mes empezó a cortarse un poco el agua y a notarse el déficit hídrico en las chacras, que va a impactar algo, pero pensamos que igual el resultado va a ser bastante bueno”.
Córdoba señaló que la situación del litoral norte del país “es un poco mejor de lo que es el sur, desde donde recibimos noticias de chacras que realmente están seriamente comprometidas”. Si bien el período que atraviesa el cultivo en la actualidad es el tramo final del llenado de grano, el técnico dijo que “algo nos va a afectar, pero ya se jugó el partido como quien dice”.
Respecto a los rendimientos esperados en la cooperativa, indicó que “respecto a trigo pensábamos superar los 3.000 o 3.500 kilos, tanto en trigo como cebada. Indudablemente que el impacto de la falta de lluvias lo vemos después de que cosechamos, es difícil evaluarlo ahora en el momento”.
Córdoba recordó que los costos en “fertilizantes, combustibles y herbicidas están muy altos”, por lo que entiende que estos valores “ponen la vara alta, en cuanto a la eficiencia del productor, digamos, que con esos costos elevados hay que sí o sí, tener buenos rendimientos”.
Ante esto dijo que “superando los 3.000 kilos ya queda un resultado positivo”.
Sobre las áreas de semilleros de raigrás y avena, el profesional dijo que “es más difícil de estimar un rendimiento. Pero estamos presupuestando para el recibo, en el entorno de 1.000 a 1.200 kilos raigrás y 2.000 de avena.