Al cierre del Octavo encuentro de la Mesa Tecnológica de Oleaginosos, este año denominado ‘’Construyendo un agro sustentable’’ Panorama Agrícola conversó con el Ing. Agr. Roberto Verdera, presidente de la MTO.
¿Cuáles son las primeras conclusiones, recién terminado el evento?
Lo evaluamos de forma muy positiva, tanto desde la gerencia como desde la Mesa toda. La concurrencia, en número y en calidad. La temática elegida y la calidad de los expositores. Todos se suman para concluir que quedamos muy satisfechos.
Teníamos previsto, como desde hace unos años, la participación de Deloitte sobre el cierre del ejercicio 18/19, que realiza el trabajo para Oleaginosos Uruguay, desde hace, algunos años.
También formamos parte del Observatorio Uruguay, que se nutre de información surgida tanto del sector público como de parte de las empresas del sector. Es parte de las fortalezas de sistema, manejando con total confidencialidad y compartido entre todos los actores interesados.
¿Qué perfil se buscó darle este año?
Queríamos abordar aquellos temas que nos interpelan, que están sobre la mesa en forma permanente. La MTO ha buscado encarar los temas de medioambiente, desde el uso racional de los recursos naturales: suelo y agua. Ahí definimos darle el área temática el mayor tiempo en la exposición del Ing. Agr. PhD Carlos Perdomo. Se trata de un tema de gran trascendencia y sensibilidad, como lo es la contaminación del agua por presencia de Fósforo. En base a su trabajo, a su conocimiento y al análisis nos parecía interesante poder marcar las líneas de trabajo.
En cuanto al resto de los panelistas, se trató también de gente de muy buen nivel en su área, haciendo foco en los trabajos que están realizando. Investigadores, tanto desde la academia, como del sector público y privado, quienes mostraron el uso de las mejores prácticas agrícolas sobre las que hay que reafirmar el trabajo, en línea con seguir teniendo mejora continua.
En el tema genético, tuvimos el aporte de Don Mario y Syngenta, además del INIA, los que tienen mayor incidencia de materiales. Desde ahí surgieron las preguntas disparadoras que los encargados de los equipos de mejoradores vinculados a esas empresas pudieran dar visión de cómo ven hacia adelante el uso de la tecnología y la búsqueda de soluciones.
Hubo tiempo incluso para algún intercambio de puntos de vista, entre los investigadores, los ingenieros agrónomos Carlos Perdomo, de Facultad de Agronomía y Alejandro García, del INIA, con visiones complementarias sobre el uso del glifosato.
Sí, se trata de profesionales destacados, que superaron las expectativas. Creemos que todo eso anduvo muy bien por elegir la temática y la calidad. Se trató de un enfoque complementario, con la constatación que el glifosato es una herramienta de trabajo que mantiene vigencia, pero la búsqueda de nuevas alternativas van en el mismo sentido, de no quedar atados a la falta de opciones.
Otros temas estuvieron vinculados a la conservación de suelos, a través de la siembra directa. En Uruguay, volver al laboreo no es una opción, los problemas que la siembra directa pueda tener asociados, hay que repensar en cómo solucionarlos.
Realmente fue una jornada muy interesante y el cierre con el director de Dirección y Aguas del Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca – MGAP – el Ing. Agr. Federico Montes, presentó un resumen de las tareas que el MGAP viene desarrollando en este momento y hacia adelante, respecto al sector.
Creemos que ha sido una jornada importante, con mucha información, de muy buena calidad y esperamos que sirva de insumo para distintos actores vinculados a la cadena de producción.
Cumplió plenamente con las expectativas.
¿Qué espera la MTO para el próximo año?
El escenario del próximo verano es con una superficie de soja similar al año pasado o, en el peor de los casos, una reducción mínima. Existe gran incertidumbre en qué pasa con los mercados, con la guerra comercial, y con la inestabilidad política y financiera en la región. Es un tema de evaluación permanente. Igualmente, cuando analizamos los diferentes rubros de secano, la soja sigue ocupando lugar principal por ventajas y resultado económico frente a otros cultivos. Con la incertidumbre de peso presente, en términos generales en ese escenario debería ser similar al año anterior.
¿Cuáles son los próximos objetivos y eventos?
En temas institucionales, estamos trabajando fuerte para mejorar el armado institucional de la agricultura de secano. Intentamos coordinar las diferentes mesas, todo lo que sea sistémica y corte transversalmente estamos viendo para coordinar hacia el cambio que permita ser más eficiente en el uso de todos los recursos: financieros, humanos, etc
¿Con qué otras instituciones se está trabajando en paralelo?
Desde hace años intentamos ampliar la MTO y lo hemos logrado, incorporando al Latu, Facultad de Agronomía y al INIA. También incorporamos a empresas de originación – locales y multinacionales – de acopio y exportación. Con Oleaginosos Uruguay aparecen el MGAP y otras instituciones vinculadas: Inase, Anaprose, CUS y Camagro. Hay un mayor espectro de integrantes y eslabones de la cadena que permite encarar vinculados a agroquímicos y semillas, buscando generar mayor productividad en el rubro que sea: soja, girasol u oleaginosas de invierno.
Tenemos presente la importancia de hacer foco en la productividad, sin descuidar aspectos como el cuidado de los recursos. Ahí hay trabajo con otras instituciones, la MTO intenta integrar, con visión de articulación de demandas y búsqueda de soluciones.
